En Estados Unidos, más de 8% de adultos con diagnóstico de los tipos de cáncer más frecuentes llegan a presentar una segunda neoplasia maligna (de cualquier tipo, incluyendo tumores malignos infrecuentes), según un análisis de datos estadounidenses de los dos últimos decenios.
El segundo cáncer primario diagnosticado con más frecuencia fue cáncer de pulmón (18% de todos los segundos primarios), seguido de cáncer colorrectal (12%), cáncer de próstata (9%) y cáncer de vejiga (8%).
Los segundos tumores malignos primarios a menudo fueron letales. Más de la mitad de los pacientes (55%) fallecieron por su segundo cáncer primario, en tanto que 13% fallecieron por su primer cáncer primario.
Los oncólogos, otros especialistas y los médicos de atención primaria debieran estar atentos no sólo a la recidiva de un cáncer inicial, sino a los segundos tumores malignos primarios, dijo a Medscape Noticias Médicas el autor principal, el Dr. Nicholas Donin, urólogo en la Escuela de Medicina David Geffen de la Universidad de California, Los Ángeles.
El estudio fue publicado en versión electrónica el 5 de julio en Cancer.
El Dr. Donin y sus colaboradores identificaron en datos del Programa de Vigilancia, Epidemiología y Resultados Finales más de 2,1 millones de adultos con diagnóstico de un tumor maligno primario de los 10 órganos afectados por cáncer con más frecuencia (próstata, mama, pulmón, colon, recto, vejiga, útero y riñón, junto con sitios afectados por melanoma y linfomas no Hodgkin) en el periodo comprendido entre 1992 y 2008.
De ese grupo, 170.865 (8,1%) presentaron un segundo tumor maligno primario; la media de seguimiento fue mayor de 6 años en todos los tipos de cáncer primario (con excepción del cáncer de pulmón primario, que fue de 4,18 años).
Los pacientes con cáncer de la vejiga tuvieron la incidencia acumulada más alta y 19% presentaron un segundo cáncer a los 10 años y 34% a los 20 años. Con más frecuencia, ese segundo tumor maligno fue cáncer de pulmón (25% de los casos).
«Los tumores malignos de la vejiga se suelen asociar a un antecedente de tabaquismo importante. Los urólogos deben pensar en remitir a estos pacientes para detección de cáncer de pulmón», explicó el Dr. Donin.
También observó que es comprensible que los pacientes con cáncer de vejiga tuviesen la tasa más alta de un segundo cáncer primario.
La mayor parte de los tumores malignos de la vejiga son de grado y etapa poco avanzados y no son letales. La sobrevida relativa a 5 años por cáncer de la vejiga es del 80% y la enfermedad tiene una gran prevalencia (en 2012, hubo 577.403 sobrevivientes de cáncer de la vejiga en Estados Unidos).
Los segundos tumores malignos primarios son letales
«No me sorprende el porcentaje de segundos tumores malignos primarios en los sobrevivientes por diversos motivos», dijo el Dr. Eric Horowitz, un oncólogo radioterapeuta del Centro de Cáncer Fox Chase en Filadelfia, Pensilvania, quien no intervino en el estudio.
Dijo a Medscape Noticias Médicas: «Nuestros tratamientos primarios han mejorado bastante y hay más sobrevivientes que viven por periodos más prolongados».
El Dr. Horwitz recordó a los médicos clínicos «continuar efectuando detecciones de otro cáncer» en sobrevivientes de cáncer. «Los pacientes con cáncer de pulmón todavía necesitan ser objeto de detección de un cáncer colorrectal», dijo.
Los investigadores también descubrieron que los segundos tumores malignos suelen ser letales.
Los pacientes con cáncer de pulmón todavía necesitan ser objeto de detección de un cáncer colorrectal
Dr. Eric Horowitz
En el grupo de pacientes con dos tumores malignos primarios, un diagnóstico de cáncer de pulmón fue el más letal, contribuyendo con 12% a todas las muertes en ese grupo, lo cual contribuyó a más muertes en general que el total combinado de melanoma, cáncer de vejiga, cáncer de tiroides, cáncer renal o cáncer endometrial, que fueron segundos tumores primarios.
El Dr. Donin dijo que la prominencia del cáncer de pulmón como un segundo cáncer y como causa de muerte, llamaba la atención.
«Esto no comenzó como un artículo sobre cáncer de pulmón, sino como un esclarecimiento», dijo, añadiendo que el cese del tabaquismo se vuelve muy importante en los sobrevivientes de cáncer.
Es una pregunta que vale la pena plantear
Dr. Nicholas Donin
El Dr. Donin también plantea la hipótesis de que el cáncer de la vejiga podría ser un marcador de alto riesgo de cáncer de pulmón. «Es una pregunta que vale la pena plantear», dijo, haciendo referencia a un proyecto de investigación potencial.
Los autores del estudio dicen que los sobrevivientes de cáncer pueden ser «muy susceptibles» a presentar segundos tumores malignos primarios por diversos factores singulares, entre ellos, síndromes genéticos, factores de riesgo comunes (sobre todo tabaquismo) y los efectos tardíos de la quimioterapia y la radioterapia.
Sin embargo, al comentar sobre el estudio, el Dr. Horwitz adujo que los segundos tumores malignos por tratamiento del cáncer son «más un problema con los sobreviviente de tumores malignos de la infancia». Este estudio no incluyó a pacientes con cáncer menores de 18 años de edad. Planteó que «hay un pequeñísimo riesgo de un segundo cáncer por radioterapia».
Los autores del estudio reconocieron que había una probabilidad de que los segundos tumores malignos en realidad fuesen metástasis de las neoplasias malignas iniciales.
Sin embargo, esto fue improbable, dijeron los autores, ya que excluyeron casos en los cuales se diagnosticó un segundo tumor maligno primario al cabo del primer año del primer cáncer (n = 557.346). Asimismo, muchos segundos tumores malignos (por ejemplo, de próstata, mama, cáncer colorrectal y de la vejiga y linfomas no hodgkinianos) se hallan en lugares improbables para metástasis.
El estudio fue financiado en parte por el Programa de Académicos de Investigación de la Fundación de Atención en Urología, la Beca Posdoctoral de la American Cancer Society, el Programa de Reembolso del Préstamo del National Institutes of Health y la Fundación de Cancer STOP. Los autores del estudio han declarado no tener ningún conflicto de interés económico pertinente.