Permite analizar los efectos de las mutaciones a gran escala. Una técnica acelera la búsqueda de nuevos tratamientos contra el cáncer.
La Escuela de Medicina de la Universidad de Virginia (EEUU) ha desarrollado una nueva técnica que permite a un único laboratorio realizar el trabajo de decenas en investigación contra el cáncer, un hecho que permite acelerar de manera considerable la búsqueda de nuevos tratamientos y curas.
Además, este nuevo método no solo se aplica al cáncer, pues posibilita personalizar los tratamientos para pacientes que sufren algún tipo de enfermedad originada por una mutación genética.
«Ningún paciente debe recibir el mismo tratamiento, ni aun padeciendo la misma enfermedad, ya que esta es muy individual en cada uno y, por ello, tienen que ser tratados de manera diferente», ha subrayado el director del equipo que ha creado la técnica, J. Julius Zhu.
La nueva técnica permite a los científicos analizar los efectos de las mutaciones de genes en una escala y una velocidad impensables hasta el momento, y con una reducción de los costes respecto a los métodos tradicionales. Esto significa que en lugar de que los pacientes piensen en el tratamiento adecuado para una determinada enfermedad, los médicos recomienden el fármaco específico para el paciente dentro del tratamiento de la patología.
Sin embargo, según ha explicado el doctor Zhu, comprender el efecto de las mutaciones del gen ha sido un trabajo «muy lento», aunque «ahora, con suerte, se pueden hacer 40 o 100 de estas mutaciones al mismo tiempo».
Para demostrar la eficacia de la nueva técnica, el doctor ya ha analizado aproximadamente 50 mutaciones en el gen BRAF, mutaciones que han sido relacionadas con tumores y a un trastorno del desarrollo neurológico conocido como síndrome cardio-facio-cutáneo.
Recuperación de tratamientos fallidos
La nueva técnica permite también a otros investigadores recuperar aquellos tratamientos que resultaron fallidos en algunos pacientes, para determinar por qué no pudieron ser adecuados para cada uno de estos de manera individual.
«Nos preguntamos por qué en estos pacientes a veces no funciona un tratamiento, cuando el mismo hace que unos mejoren y otros sigan empeorando. La razón es que no se sabe cuáles son los medicamentos que van a ayudar a su mutación particular», ya que el paciente tiene la misma enfermedad, pero una mutación diferente, ha concluido Zhu.